El equipo que dirige Ricardo García regresa de tierras gallegas sin metales, pero con la sensación de mejora con respecto a la primera cita de la temporada desarrollada en Santander

Los inicios de temporada suelen ser complicados. Es tiempo de rodaje y ensamblar las piezas y en ello está el equipo de Judo Club Avilés. Llegaba la segunda cita para los cadetes, en esta ocasión en Vigo, con una selección por parte de club compuesta por Nel Suárez, Saúl Fernández, Nacho Suárez y Noé Rodríguez.

Los cuatro volvieron sin medalla de la competición en tierras gallegas, aunque su entrenador pone en valor el trabajo, más allá de las preseas, y la mejoría con respecto a la Copa de Cantabria. “Estuvimos mucho más estructurados y planteando combates ‘reales’ con rivales de nivel”, apuntaba Ricardo García.

Vigo se vio como “una buena oportunidad para rodarse” ya que contaban entre los competidores con la selección portuguesa y rivales exigentes de otras comunidades autónomas. Sin duda, una buena piedra de toque para ir engrasando la maquinaria de cara al Gran Evento Torneo Internacional Villa de Avilés que se disputará en casa los próximos 26 y 27 de octubre donde se volverán a ver las caras con algunos de ellos.

El técnico avilesino destaca la competición de Nel Suárez y Noé Rodríguez, ambos séptimos clasificados tras avanzar en varias rondas de la Copa y quedarse a las puertas de la lucha por el bronce. “Hubo errores tácticos que vienen de la falta de concentración y eso no está sacando de los torneos”, insistía García.

En el otro lado de la balanza se encuentran Nacho Suárez y Saúl Fernández. En el caso del primero, considera que “está acusando su iniciación en la nueva categoría y tampoco tuvo su mejor día por cuestiones de salud, aunque eso no es excusa para los próximos evento”. La mayor insatisfacción viene con el segundo: “Saúl tiene calidad de sobra para hacerlo mejor”, apuntaba el míster y señalaba al componente mental, fundamental en la competición. “Tenemos que encontrar la manera de hacer clic en su cabeza para sacarle todo el partido a su judo”.

Ahora el equipo disfruta de una semana de descanso en lo que a competición se refiere y con la mira puesta en el Villa de Avilés. En este caso, el entrenador lo tiene claro: “Los objetivos para muchos de ellos son la medalla. Tenemos tiempo para pulir durante dos semanas los errores y dar la mejor versión en casa”.